lunes, 15 de octubre de 2012

SUELO DE HORMIGÓN






Este nuevo trabajo que os presentamos es un solado de hormigón. En nuestro caso va a ser el cimiento para un horno de leña, aunque se le puede dar otros usos. El grueso que dependerá de lo que vayamos a construir encima.

Estudiamos como debiamos de construirlo y el resultado de nuestro suelo fue una especie de baldosa de 120 X 120 cm y un grueso de aproximadamente 25 cm.


Consultando con los operarios de los materiales de construcción, nos recomendaron esta mezcla: 

  • 1 parte de cemento
  • 3 partes de árido de las cuales fuesen 1.5 de arena 1.50 de grava 
Ellos mismos nos calcularon la cantidad de material y compramos 1/2 m3 producto.

Lo mezclamos por partes en la carretilla ya que no tememos hormigonera el agua se la vas poniendo según vas viendo su textura. Es muy importante que quede muy bien batido y que no quede muy líquido.

Físicamente es un poco duro pero bueno siempre tienes la opción de llamar a un albañil aunque ya sabes lo que pienso, un albañil te va a cobrar entre 100 a 300 € y a si lo haces tú posiblemente no llegue a 30 €.  

Para comprar todos los materiales puedes hacerlo en Leroy Merlin o en cualquier tienda de materiales de construcción, seguro que en tu barrio o pueblo hay uno. Yo recomiendo los segundos y no por que tenga nada en contra de Leroy sino porque en las tiendas que vende a profesionales te pueden enseñar muchas cosas.

Cuando compramos  los materiales pregunté si para lo que queríamos  lo teníamos  que hacer con hormigón armado (se dice que es hormigón armado cuando a la mezcla se le mete un mallazo de hierro que lo hace muchísimo más fuerte) ellos me comentaron que no era necesario, que aunque el peso del horno será de unos 750 kg el solado aguanta perfectamente ese peso. 
 
Así que si tú proyecto es para que aguante más peso o por otros motivos quieres que sea más fuerte ya sabes que puedes meterle esas barras de hierro haciendo una cuadrícula y será infinitamente más fuerte.




 

Prepara el terreno quitando raíces y dejando el suelo lo más plano posible.







Delimita la zona una cuerda, en nuestro caso además utilizamos unos ladrillos para dejar a escuadra el cuadrado.

En esta parte hay que ser meticuloso porque si no lo dejamos a escuadra, cuando sigamos la construcción sobre el solado, nos puede quedar torcido.





 
Escava un agujero de unos 15cm lo más y conviene apisonar la tierra.

Seguidamente hicimos un encofrado con madera de aglomerado, en nuestro caso por falta de conocimiento las compramos demasiado anchas aunque de ello nos dimos cuenta un poco tarde.




De todos modos no perjudicó nuestro trabajo, es más, creo que nos vino bien ya que como el sitio donde lo pusimos hacia un poco de cuesta, el mismo hormigón se puso a nivel dentro del encofrado.                                                      





Una vez que estés en este punto no te queda más que hacer carretillas y carretillas de hormigón. Si empiezas a echar hormigón a las once y media de la mañana a las tres te podrás sentar a comer, eso sí probablemente sudando.
                                                                                                                     Luego lo dejamos secar durante una semana, quitamos las tablas y ya está. Ahora solo nos queda seguir con nuestro horno. Espero algún día mostrarte nuestro primer asado.   
                                           

                 

No hay comentarios:

Publicar un comentario